Físicamente es un chip de memoria en el que se almacena un código que el ordenador utiliza al conectarse la corriente. El código marca los pasos para que el hardware se inicie y compruebe los componentes.
El chip que almacena el código de la BIOS se encuentra en nuestra placa base, puede estar soldado a ella o puede estar en un zócalo por lo que se puede sustituir. Hay tres tipos de BIOS y su diferencia está en el método que se utiliza para grabarla:
1. ROM ---> Sólo se puede grabar en el momento que se fabrica el chip. La información que contiene no se puede alterar.
2. EPROM ---> Estos chips se pueden grabar con luz ultravioleta. En la parte superior del chip se puede apreciar una especie de ventanilla transparente, que suele estar tapada con una pegatina. Estas BIOS se encuentra principalmente en 286 y 386.
3. Flash BIOS ---> Son los más utilizados en la actualidad. Estos chips se pueden grabar mediante impulsos eléctricos por lo que el propietario del ordenador la puede actualizar con un programa.
Otro componente que está ligado directamente a la BIOS es la CMOS: Complementary Metal Oxide Semiconductor. Es una pequeña porción de RAM, que almacena los valores y ajustes de la BIOS: la hora, la fecha y los parámetros de los dispositivos de nuestro ordenador. La CMOS, al ser memoria RAM, tiene que estar continuamente enganchada a la corriente eléctrica para no perder la información. Cuando nosotros apagamos el ordenador entra en funcionamiento una pila de litio situada en la placa base. Esta pila no es recargable y tiene una vida aproximada de cinco o seis años.
Entre otros, la BIOS contiene el programa de configuración: los menús y pantallas que aparecen cuando accedemos a los parámetros del sistema, es decir , al pulsar una secuencia de teclas cuando la máquina arranca. El interface que utilizan estos programas actualmente es mucho más amigable que hace unos años. Ahora te hacen sugerencias, te dicen dónde hay que pulsar, detectan automáticamente los componentes.
Algunos tipos de BIOS